Reflexión Día 29 de Noviembre. El Lenguaje Del Adiós. Melody Beattie. Solo Por Hoy. Coda.

-soloporhoy.net

Plegaria Solo por Hoy

"Dios Concédeme la Serenidad para Aceptar las cosas que no puedo cambiar, Valor para cambiar las que sí puedo y Sabiduría para distinguir la diferencia."

Así Sea. Así Sea. Así Sea. 

Codependencias y Adicciones a las Relaciones. Literatura Codependientes Anónimos.



PASO 12

El Paso Doce dice que habiendo obtenido un despertar espiritual, tratemos de llevar este mensaje a los demás. Nuestro mensaje es de esperanza, de amor, de consuelo, de salud, un modo de vida mejor, que funciona.
¿Cómo lo llevamos? No rescatando. No controlando. No obsesionándonos. No volviéndonos evangelistas de la causa de la recuperación. Llevamos este mensaje de maneras pequeñas, sutiles pero poderosas. Hacemos nuestro propio trabajo de recuperación y nos convertimos en una demostración viviente de esperanza, de amor a sí mismo, de consuelo y de salud. Estas calladas conductas pueden ser un poderoso mensaje.
Invitar, no ordenar ni exigir a alguien a que acuda a una reunión es una manera poderosa de llevar el mensaje.
Asistir a nuestras reuniones y compartir con los demás cómo nos funciona a nosotros la recuperación es una forma poderosa de llevar el mensaje. Con frecuencia, nos descubrimos a nosotros mismos llevando el mensaje en forma más efectiva que cuando nos disponemos a reformar, a convencer o a obligar a alguien a que entre en recuperación.
Cuidar como nanas a los demás y controlar no son formas de llevar el mensaje. Lo único que acarrean esas conductas es codependencia. Y empero, la forma más poderosa de ayuda a los demás consiste en ayudarnos a nosotros mismos. Cuando hacemos nuestro propio trabajo y somos honestos y abiertos acerca de ello impactamos más a los demás que con nuestro gesto “ayudador”, más bien intencionado. No podemos cambiar a los demás, pero cuando nos cambiamos nosotros mismos, podemos terminar cambiando al mundo.


"Hoy me esforzaré en llevar el mensaje de maneras que funcionen. Dejaré ir mi necesidad de “ayudar” a la gente. En vez de ello, me concentraré en ayudarme y cambiarme a mí mismo. Si me viene una oportunidad para compartir mi recuperación con alguien, lo haré tranquilamente. 


Dios mío, ayúdame a demostrarle a los demás consuelo, fuerza y esperanza. Podré ser un canal para ayudar a los demás cuando esté listo. Esto no tengo que forzarlo; ocurrirá de manera natural".

Comentarios